No vamos a repetir qué es el elevator speech. Lo sabes de sobra. Ya te lo hemos explicado varias veces. También cómo conseguir el elevator speech perfecto. Si ya tienes tu discurso de menos de 30 segundos que resume quién eres y lo que sabes hacer, ¡felicidades! Ahora, lo que debes hacer es sacarle el máximo partido. ¿Cómo? ¿Por qué no lo incorporas en tu estrategia de marca personal?
Es muy fácil. Tu elevator speech habla de ti, de qué sabes hacer y cuál es tu interés profesional. Seguramente, son unas palabras que puedes utilizar en la estrategia de marca en muchos sitios. Sólo hace falta pararse a pensar un poco. Si es una genial presentación, breve y concisa, ¿por qué no la utilizas, por ejemplo, en tu presentación de Linkedin? Es lo que primero leerán los potenciales empleadores.
También puedes incluir tu original elevator speech en tu carta de presentación. ¿Tiene sentido, no? Si esas palabras son lo que mejor te definen cómo persona y profesional y hablan de lo que sabes hacer y lo que quieres hacer, qué mejor uso que incorporarlas a tu carta de presentación. Porque además, debes recordar que el elevator speech nunca debe contradecirse o discrepar de lo que aparece en tu carta de presentación.
Otros espacios en los que puedes aprovechar ese discurso (o parte de él) son tu blog (seguramente que será una buena manera de presentarte a tus lectores), tu tarjeta de visita o la firma de tu mail (en las que puedes aprovechar una sola de las frases e incluso irlas cambiando) o el perfil de tus otras redes sociales como Twitter o Google +.
Al fin y al cabo, si incorporas ese elevator speech a toda tu estrategia de marca personal te aseguraras que toda tu presencial online u offline tenga coherencia y en todos los sitios, tu discurso sea el mismo.
