Hacer ejercicio mientras trabajas es posible
Uno de los buenos propósitos que nos planteamos con el inicio del año es hacer más deporte, pero luego nos encontramos inmersos en la vorágine del día a día y el gimnasio se queda relegado a un segundo plano. ¿Quién no está pagando las cuotas sin pisar las instalaciones deportivas? Pero el trabajo o la falta de tiempo no puede ser una excusa para no hacer deporte y tener una vida sedentaria. Por ello, en este post, te contamos algunos trucos y ejercicios que puedes realizar a diario para tener un estilo de vida más saludable y conseguir el objetivo que establece la OMS: hacer un mínimo de 30 minutos de ejercicio físico al día.
Camina. Si las distancias te lo permiten, puedes ir andando o en bicicleta al trabajo, pero si te es imposible y optas por el transporte público puedes bajarte un par de paradas antes y hacer el resto del trayecto caminando. Si no tienes otra opción que ir en vehículo privado al trabajo, puedes aparcar tu coche lejos de la entrada de tu empresa para obligarte a dar un paseo.
Olvídate del ascensor. Cuando llegues al trabajo elige las escaleras en lugar del ascensor para llegar a tu oficina. Además, si las oficinas de tu empresa cuentan con diferentes pisos, utiliza las escaleras, en lugar del ascensor, cuando tengas una reunión con colegas de otros departamentos. Es una forma de realizar ejercicio cardiovascular y tu corazón lo agradecerá.
Convierte tus breaks en paseos. Cuando decidas tomarte un descanso para oxigenar el cerebro piensa también en tu corazón. Puedes aprovechar para caminar por los pasillos de la oficina a un paso ágil, eso sí, no corras o tus compañeros pensarán que hay una emergencia.
Busca momentos para estar de pie. Por ejemplo, puedes hablar por teléfono mientras paseas o no sentarte mientras tomas un café.
Refuerza tus abdominales. ¿Te has planteado ejercitar tus abdominales mientras trabajas? Lo único que necesitas es tu silla. Un fácil ejercicio consiste en estar bien sentado, con la espalda y los hombros rectos, levantar las piernas unos 5 cm del suelo y mantener la posición durante 10 segundos. De este modo contraerás tus abdominales.
Ejercita tus aductores. Mientras estás sentado, puedes ponerte un libro o un paquete de folios entre los muslos y hacer presión hacia adentro. Es un trabajo que te ayudará a ejercitar los aductores.
Entrena tus brazos. Con un par de pesas pequeñas, que puedes guardar en un cajón, o dos botellas de agua puedes hacer una gran variedad de ejercicios como flexiones de bíceps, extensiones de tríceps o abducción de hombros.
Ahora, ya no tienes excusas para no hacer ejercicio mientras trabajas.