¡Atrévete a hacer esa llamada!

Publicación
02 de junio de 2016
Lectura: 2 minutos
Imagen. Autocandidatura telefónica ¡Sigue el ejemplo! . Adeccorientaempleo

Tomar la decisión de realizar una autocandidatura telefónica, es decir, llamar a un desconocido para presentarte puede ser un momento un poco incómodo, pero esta oportunidad puede también convertirse en un instante sublime en el que, con una buena dosis de actitud positiva y utilizando todas tus habilidades para la persuasión, logres asestar un tanto definitivo en tu búsqueda laboral.

Realizar estas llamadas es un verdadero arte que puedes aprender a dominar y utilizar a tu favor. En primer lugar, deja de lado tus propios prejuicios. No hay nada de malo ni extraño en ponerse en contacto con alguien para presentarte y mostrar tu interés por su trabajo.

No hay nada extraño en contactar con alguien para presentarte y mostrar interés por su trabajo Clic para tuitear

En segundo término, recuerda -más que nunca- que ‘el tiempo es oro’. El tuyo y el de tu interlocutor. Para iniciar la conversación de la autocandidatura telefónica, preséntate con tu nombre y apellido y prepara un buen elevator speech que resuma tus intereses y tu experiencia profesional. Recuerda la importancia –extrema en este caso- de la concisión.

En tercer lugar, muestra tu interés por su trabajo y su empresa. Explícale cómo has llegado a tener su contacto y el motivo por el que te has decidido a comunicarte.

Finalmente, solicita una entrevista o un encuentro informal y sugiere posibles días u horarios, mostrándote siempre flexible y abierto a otras propuestas. Y no olvides dejar tu número o datos de contacto para facilitar los futuros encuentros.

Ten presente también que quizás no logres hablar directamente con la persona en cuestión y, tal vez, debas dejar un mensaje de voz en su contestador. Ambas opciones son buenas. Simplemente aprovecha la primera que aparezca y procura realizar solo un llamado y no mostrarte demasiado insistente. Si deseas probar suerte nuevamente, espera uno o dos días antes de volver a intentarlo.

Un ejemplo de un mensaje de voz, podría ser el siguiente:

“Buenos días Berta. Mi nombre es Marta González. Soy licenciada en química especializada en control de calidad y estoy buscando nuevos desafíos profesionales.  Su experiencia me parece muy interesante y me gustaría poder compartir una charla para saber más sobre su trabajo y empresa. Si a usted le parece bien, podríamos coordinarla para esta semana o la próxima. Mi número de contacto es 66785497. Muchas gracias por su tiempo. Saludos”.

Adapta el mensaje a tus propias necesidades y ¡atrévete a coger el teléfono para solicitar la entrevista que tanto deseas!

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